Ayer fue un día perfecto para trabajar al aire libre en nuestro Taller de Jardinería. Con Montaña como guía, los usuarios se dedicaron a preparar los nuevos semilleros de temporada y a cuidar las plantas que tan bien han crecido.
Entre trasplantes, riegos y mucha tierra en las manos, hemos disfrutado del contacto con la naturaleza mientras desarrollamos habilidades manuales y cognitivas. Ver sus caras de satisfacción cuando las plantas crecen sanas es el mejor premio.
Cada usuario trabaja a su ritmo, adaptando las tareas a sus habilidades, pero todos compartimos el mismo objetivo: cuidar y hacer crecer la vida.